Ha I I Hwa en el Palacio de Viana Ha I I Hwa da detalles de su obra mientras realiza el montaje de la misma en el Palacio de Viana. FOTO: CHENCHO MARTÍNEZ

Flora 2023 en Córdoba: los detalles de la instalación de la artista coreana Ha I I Hwa

La autora floral, inspirada por la filosofía y el arte oriental, destaca por la creación de obras que ella misma define como "plantas alienígenas"

A jueves, 19 de octubre del 2023, por A. P.

Continúan en Flora 2023 las actividades paralelas previas a la apertura a las visitas de las cinco instalaciones que componen este Festival Internacional de las Flores que se desarrolla en Córdoba hasta el próximo 26 de octubre. Tras la masterclass sobre confección de guirnaldas ofrecida por la artista británica Harriet Parry, quien expondrá su obra en el Patio de los Naranjos de la Mezquita-Catedral, este martes ha sido otra de las artistas internacionales participantes en la cita, la coreana Ha I I Hwa, la que en el Palacio de Viana ha dado detalles sobre su instalación in situ en pleno proceso de montaje. Lo ha hecho poniendo especial atención a la música que ha inspirado la creación.

Antes de llegar a la botánica, Ha I I Hwa estudió diseño visual en la universidad y trabajó como diseñadora gráfica en una gran cadena de televisión, algo de lo que bebe su obra, compuesta muchas veces por especies de aliens vegetales. Hoy es una de las directoras de arte más deseadas de la escena coreana, con un estilo único y fácilmente reconocible. En el camino que va del diseño al arte floral hay un deslumbramiento: el que provoca en Ha I I Hwa la diversidad inagotable de la naturaleza. “Las formas y líneas de las plantas son fascinantes: al igual que ocurre con los rostros y expresiones humanas, resultan siempre únicas”, comenta ella misma. 

Junto con las formas botánicas, la otra gran inspiración de la artista son la filosofía y el arte oriental, por su búsqueda constante de armonía entre la naturaleza y las personas. Sus trabajos florales parecen llegar del futuro: combina plantas y elementos artificiales para crear mundos inexplorados, seres imaginarios que ella misma define como “plantas alienígenas” y que no solo impactan visualmente: con ellas quiere llamar la atención sobre una posible naturaleza futura en la que cambio climático y tecnología logren dialogar. 

También ha sido el día en el que el jardinero e investigador botánico en obras de arte Eduardo Barba ha impartido una conferencia en el Museo Arqueológico de Córdoba, Aquella botánica. En ella, Barba ha hecho un repaso a los elementos naturales que se encuentran en la colección del Museo Arqueológico, lugar que acoge una de las instalaciones u obras de Flora 2023, la del artista lituano Tadeo Cern.

«Soy un jardinero amante del arte, un paisajista que disfruta pintando con plantas los espacios interiores y exteriores de nuestras casas. Desde que era un niño gozo y me olvido del tiempo observando y cultivando estos seres vivos que nos rodean», se define Eduardo Barba. Juntar el mundo de la botánica y del arte es una manera de aunar dos pasiones que le gusta transmitir. De esta forma, ha desarrollado su vocación como investigador botánico en obras de arte.

«He colaborado con instituciones como el Museo Nacional del Prado, el Museo Nacional Thyssen-Bornemisza, el Museo Lázaro Galdiano o el Museo de Bellas Artes de Bilbao, así como para colecciones extranjeras. También he impartido conferencias y publicado artículos de investigación en catálogos de cada una de ellas», detalla. El investigador insiste en que disfruta abriendo la mirada a personas a cómo se desarrolla una planta en el jardín, o a cómo un pintor ha hecho brotar a pinceladas una flor. «Para mí son dos caras de un mismo lienzo, unidas por el lenguaje de la naturaleza y de la observación. Como investigador botánico en obras de arte, me encanta aprender cada día de los grandes maestros, de su forma de mirar la naturaleza. Como jardinero, es maravilloso transformar un terreno baldío en un vergel pleno de verdes, y hacer crecer colores que inunden todos nuestros sentidos. Porque, ¿qué sería de nosotros sin plantas y sin arte?», sostiene