Florigerminis Jurassica (Nanjing Institute of Geology and Palaeontology).

Un fósil chino arrebata a España el ‘honor’ de la primera flor

El descubrimiento del profesor Wang Xin es 34 millones de años anterior a la planta más antigua de ese tipo conocida hasta ahora

A viernes, 20 de enero del 2023, por Juan M. Niza

La Florigerminis Jurassica, un fósil encontrado recientemente en la región de Mongolia interior de China, pero que ya está apareciendo en reportajes científicos divulgativos de todo tipo (incluso se ha hecho eco uno de esos grandes documentales de la BBC de Sir David Attemborougth), y con 164 millones de años de antigüedad, parece haberle arrebatado a España el ‘título’ de poseer la planta de flor más primitiva que se conocía hasta ahora, la Montsechia vidalii, con 130 millones de años a su espaldas. Pero sin problema… Se trata solo de otra batalla más de la ciencia, en donde no hay títulos honoríficos, por resolver el enigma de la aparición de las plantas angiospermas, las plantas de flor que han llegado hasta nuestros días pero que supusieron una ‘revolución’ respecto a las anteriores que dominaron la tierra seca en el planeta: las plantas gimnospermas.

Detalle del fósil de Florigerminis juassica, foto del Nanjing Institute of Geology and Palaeontology.
Fósil de la ‘española’ Montsechia vidalii.

La F. Jurassica se ha descubierto (lo ha hecho el profesor Wang Xin, del Instituto de Geología y Paleontología de Nanjing) en una piedra que en su origen fue ceniza volcánica, un material que cubrió esta planta que tendría unos 4,2 centímetros de largo y 2 cm de ancho, con un diminuto brote de de unos 3 milímetros pero que ya tenía de «todo-todito» que debe tener una angiosperma, es decir, una planta de flor: capullos de flores, frutos y ramas frondosas conectadas físicamente, como determinan los expertos.

Hasta ahora, la más antigua angiosperma considerada, la ‘española’ Montsechia vidalii, solo tenía 30 milloncejos de años menos que la china (que en la evolución de los seres vivos es un suspiro). Sin embargo, ya no corresponde al Jurásico, sino al Cretácico, que comenzó hace 145 millones de años mientras esta planta, que como hemos dicho es de 130 millones de años, fue encontrada en afloraciones de fósiles de ese periodo de la Sierra del Montsec (en Lleida) y la Serranía de Cuenca. Por cierto, se trataba de una planta de flor semiacuática. Eso sí, ciencia aparte y sin saber nada de paleontología botánica… ¿A que nuestro fósil de flor es más mono? ¡Dónde va a parar!