Magnolias de acero

De la flor más pequeña y aromática que crece en los árboles de la ciudad de Córdoba, el azahar, al fin de la primavera con la mayor de las flores que cuelgan sobre nosotros: la magnolia. A fin de cuentas, de ahí viene el nombre del magnolio: de su flor ‘magna’, o sea… ‘grande’. Aunque otros lo atribuyen al apellido del botánico que descubrió la primera de sus más llamativas especies entre los 120 plantas distintas de la familia Magniliaceae; la Magnolia Virginiana, todo ello en una expedición que se hizo en 1680 en Norteamérica y en la que participó Pierrer Magnol, en todo caso… un botánico ‘magno’.

Pero lo importante es que hay que felicitar a los responsables de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Córdoba por cómo cuidan estos árboles de difícil trato y lento crecimiento, pero que pueden llegar a alcanzar los 30 metros de alturas y son muy agradecidos por los ciudadanos por sus anchas hojas, gran sombra y amable entorno… no como esos plátanos de sombra cuya plantación hace años que se prohibió en las calles de Córdoba por la cantidad de residuos orgánicos que dejan y por ser todo un trastorno para las personas alérgicas.

Si quieren disfrutar en estos días de las flores del magnolio pueden aprovechar ahora, por ejemplo, en la plaza de Colón, junto al cierre del parque y en la acera de en frente a la Diputación de Córdoba, rodeando la fuente y el conjunto que realizó hace dos décadas José Manuel Belmonte Cortés ‘Homenaje a la belleza de la mujer cordobesa’, más bellas que nunca con estas flores sobre sus cabezas.

Los magnolios se han beneficiado también de las lluvias y tormentas de finales de mayo, que han ido dejando en la ciudad en torno a 60 listros de agua por metro cuadrado acumuladas en diez días. También lucen preciosas en este comienzo de junio acacias, adelfas…

Y una ‘floritura’ más sobre las magnolias: Se trata de un árbol tan antiguo que no se deja polinizar por las abejas ya que cuando evolucionó… ¡Ni siquiera existían los himenópteros! Fue antes de Cretácico, lo que nos recuerda que este árbol casi es un ‘fósil viviente’. Así que su polinización la realizan…¡Escarabajos! Quizá por eso el gran tamaño de las flores. Todo el mundo sabe que los escarabajos son más miopes que las abejas (esto último, por supuesto, es broma).